Bukhara

GRANDES VIAJES

BUKARA. UZBEKISTÁN

Los mercaderes te ofrecían sus productos artesanales, cuchillos, pañuelos, pinturas, tapices, alfombras,…. los edificios antiguos mezclados con mezquitas, madrazas, minaretes hacían que el paseo por sus calles fuera como volver a vivir en la época de los emires, las rutas de caravanas y esa época de esplendor de la “Gran ruta de la seda”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Es una ciudad con mas de 2.000 años de antigüedad. El centro histórico de Bukhara, es uno de los mejores ejemplos de ciudades islámicas bien conservados de Asia Central de los siglos X al XVII, con una trama urbana que se ha mantenido en gran parte intacto.

Bukhara fue durante mucho tiempo un importante centro económico y cultural en Asia Central. La antigua ciudad persa fue un importante centro de la cultura islámica desde hace muchos siglos y se convirtió en un importante centro cultural del Califato en el siglo VIII.

Con la excepción de algunos importantes vestigios anteriores a las invasiones de los mongoles de Genghis Khan en 1220 y Temur en 1370, la vieja ciudad es testigo del urbanismo y la arquitectura de la época Sheibani del gobierno uzbeko, desde principios del siglo XVI. La ciudadela, reconstruida en el siglo XVI, ha marcado el centro cívico de la ciudad desde sus orígenes hasta la actualidad.

Importantes monumentos que sobreviven desde épocas tempranas incluyen la famosa tumba de Ismail Samanai , impresionante por su sobria elegancia y el mejor ejemplo superviviente de la arquitectura del siglo X en todo el mundo musulmán. Desde el período Karakhanid siglo XI viene el excepcional minarete Poi-Kalyan, una obra maestra de la decoración en ladrillo, junto con la mayor parte de la mezquita Attori Magoki y el santuario Chashma Ayub.

Sin embargo, la verdadera importancia de Bukhara no radica en sus edificios individuales, sino más bien en su paisaje urbano en general, lo que demuestra el nivel alto y constante de la planificación urbana y la arquitectura, que comenzó con la dinastía Sheibanid.

Bukhara bien merece una visita tranquila y para disfrutar de sus calles, gentes y monumentos.